por El Norte es complejo, un lugar difícil en el que clima es abrupto y sus gentes pueden parecer ásperas a primera vista pero basta con sumergirse un poco más para descubrir que tras esa primera imagen de dureza en su interior se encuentra un lugar hermoso cargado de historias, leyendas y tradiciones de lo más singular. El Norte es ese lugar en el que un músico que atesora cantidad de horas de avión, de furgoneta o autobús decide embarcarse en un curragh y peregrinar a una pequeña ciudad de interior tras cruzar el mar.
Esta podría ser otra leyenda. Una en la que contemos como cuatro irlandeses deciden zarpar en un barco abierto, sin cubierta, a remo para llegar a Santiago de Compostela. Pero lejos de una leyenda este viaje es historia. Es la historia del «Noamh Gobnait«, que partía desde el Río Liffey (Dublin) en 2014 y viajaba a o largo de tres años para conmemorar los 800 años del primer registro de peregrinación de irlandeses a Compostela. Un barco inicialmente tripulado por Danny Sheely, Liam Holden, Brendan Begley y Brendan Moriarty, quien tuvo que abandonar el viaje en su último tramo, siendo sustituido por Glen Hansard, quien remó más de 700 kilómetros a bordo del curragh y posteriormente cargó con el bote para cubrir por tierra el último tramo del Camino entre Coruña y Compostela. Sin duda, como dijo Manuel Lara, responsable de la Asociación Galega do Patrimonio Industrial Buxa: «Galicia e Irlanda añadieron otro capítulo a su larga narrativa histórica y mitológica con el viaje de Danny y la tripulación de Naomhóig«, un capítulo que fue recogido en el documental The Camino Voyage estrenado el pasado año.
Sabiendo esto era inevitable que un día Glen Hansard regresase a visitar a su antiguo amigo Naomhóig, ahora rehabilitado en el Museo del Mar de Vigo tras el accidente que costó la vida a Danny Sheely, lo acariciase y brotasen de nuevo antiguos recuerdos. Recuerdos que la siguiente noche compartiría con nosotros sobre el escenario del abarrotado Pazo da Cultura de Pontevedra. Allí, Hansard ofreció uno de esos conciertos que consiguen emocionar desde el primer minuto, un concierto que ponía además fin a esta edición de Ciclo Voices y que posiblemente haya sido uno de los mejores que he tenido el placer de disfrutar este 2019.
Sí, Glen se encuentra en España presentando su cuatro trabajo en solitario, «This Wild Willing«, lo habréis leído en cientos de publicaciones pero Pontevedra, quizás por el reencuentro con aquel bote que costó la vida a su amigo, fue diferente. Fue diferente cuando Glen decidió hacer un alto en el camino y contarnos que había supuesto para él el accidente de Danny, o remar en un barco rodeado de tres irlandeses más haciendo escala en cada localidad del norte hasta llegar a Coruña y caminar hasta su objetivo final. Ahí Hansard abandonó su imagen de estrella del rock para convertirse en alguien que desde el otro lado de la mesa comparte una de las experiencias más importantes de su vida con nosotros.
Atornador aplauso. Silencio cargado de ilusión y tensión de niño en la víspera de Reyes. Arranca con ‘Fool’s Game‘, casi tres minutos de intimismo que se convierten en una explosión musical al alcance se esas bandas, esas bandas… esas bandas que conmueven desde la primera nota. Una banda compuesta de siete talentosos músicos entre los que destaca el maño Javier Mas quien casi con 70 años se muestra colosal en el traste de una guitarra o un laúd.
Se abrían así casi dos horas y media de música y confesiones. De la soledad un hombre interpretando al piano ‘Bird of Sorrow‘ en un escenario vacío. De la inmensidad de una banda de rock convirtiendo ‘My Little Ruin‘ en un huracán de energía desatada. De los recuerdos de cine a través de ‘When Your Mind’s Made Up‘. Sin duda un concierto poliédrico que muestra la inmensidad creativa de un hombre con ceño fruncido capaz de conquistar a cualquiera esbozando una media sonrisa y comenzando a cantar sin necesidad de micrófonos, guitarras o artificios.
Como demuestra su travesía Hansard es una aventurero y «This Wild Willing» es un nuevo paso en esta exploración. Te esperamos en tu próxima travesía Glen.
