Entramos en la cuenta atrás para la celebración de I Festival Metropolitano de Música e Artes pola Igualdade o lo que es los mismo Elas Son Artistas, un festival que apuesta por visibilizar el rol de la mujer dentro de las artes poniendo especial hincapié en el mundo de la música.
Hace unos días compartíamos con vosotros la programación del #ESA, dentro de la cual destacaba un nombre propio: ELE. La artista madrileña, acompañada por su banda, presentarán «What Night Hides» en el Teatro Colón de Coruña. Y nosotros hemos tenido la oportunidad de charlar con ELE antes de su visita a Galicia y descubrir así algo más de Elena Iturrieta y su música.
(Pregunta) – Lo primero es agradecerte que nos hayas concedido esta entrevista. Pocas veces lo medios más independientes ponemos foto sobre músicas que se alejan de pop, pero gracias a artistas como tú esto está variando poco a poco. Así que me gustaría arrancar la entrevista de una manera quizás poco ortodoxa. ELE es Elena Iturrieta, quien un día animada por su entorno decide grabar algunos temas ¿cómo una profesora de inglés decide sentarse al piano y comenzar un camino propio dentro de la música?
(Respuesta) – Un placer charlar con vosotros. Lo cierto es que es ya me sentaba al piano de pequeña, pero no cantaba. Eso fue ya en la universidad que volví a retomar mis estudios de piano y comencé a cantar en el coro gospel, con amigos en sus bandas, cantando diversos estilos. Como bien has mencionado me animaron a sacar mi proyecto hace unos 5 años y aquí estamos, disfrutando de todo lo que nos trae la música y compaginándolo con mis clases.
(P.) – «Summer Rain», tu álbum debut, fue un éxito entre público y critica. Se te comenzó a comparar con Norah Jones y otras artistas americanas que actualmente encabezan el soul moderno ¿Cómo se vive con la etiqueta de la esperanza española del soul?
(R.) – Esa etiqueta surgió en una entrevista, una entrevista muy bonita la verdad, verdaderamente cariñosa hacia mi música. Cuando se trata con respeto lo que uno hace bien recibidas sean las palabras con las que nos etiquetan. A día de hoy creo que, si había que demostrar algo, ya lo hemos hecho y quiero pensar que la esperanza se ha convertido en realidad.
(P.) – Este «What Night Hides» que ahora vienes a presentar ha sido grabado en Abbey Road ¿Cómo surge la posibilidad de grabar en estos míticos estudios londinenses?
(R.) – De pura casualidad, sin ser esperado la verdad.
Se nos dio la oportunidad de ir allí a grabar este nuevo álbum y no lo dudamos, claro. Debo decir que pensábamos que era una broma al principio, algo así tan bueno que te de la vida, es a veces inimaginable. Ángeles que se van sumando al camino y nos ayudan.
(P.) – Soy de los que piensa que etiquetarse es limitarse, por lo tanto creo que etiquetar tu música es eso limitarla. ELE es soul, es gospel, es folk, es rhythm and blues… ¿qué no ha hecho ELE que le gustaría hacer?
(R.) – Jejeje, yo siempre digo lo mismo cuanto quieren encasillar la/mi música. Tanto con el primer álbum como este segundo no hay un estilo muy definido como bien dices, sino varios con una raíz común, que creo que hacen del álbum algo dinámico y, a pesar de la variedad, funciona.
Cierto es que hago lo que me apetece, como en este «What Night Hides«, donde hago que canto ópera. Es una suerte poder hacer lo que te gusta, sin límite alguno. Por ahora he probado todo lo que me ha surgido. Veremos qué nuevo se me ocurre.
(P.) – Mientras preparaba esta entrevista leía tu gusto por componer de noche, lo hacía mientras escuchaba este «What Night Hides», y de repente ‘Nocturnal’. En ese momento de casi dos minutos dejé de escribir y todo se resumía en una pregunta, la misma que ahora me gustaría hacerte: ¿por qué?
(R.) – ‘Nocturnal‘ es un tema que compuse a las 3 de la madrugada con motivo del cumpleaños de mi madre. Teníamos concierto justo esa fecha y de repente se me ocurrió esta pieza. No la cantaba, simplemente era piano. La voz quise meterla cuando ya avise a Pablo que ese tema iría entre otros del álbum.
Siempre me ha gustado cantar “ópera” en el garaje de casa, que tiene una acústica estupenda. Y nada, ahí me lancé en Abbey Road a grabar esta pieza a voz y piano, muy feliz de que haya quedado así ¡¡¡Lo repetiré!!!!
(P.) – Lo acabas de mencionar así que es justo hablar de él. De nuevo has contado en la producción con Pablo Cebrián quien ha trabajado con artistas tan dispares como Marwan, Nach, Alex Ubago o Tote King ¿qué aporta Pablo al sonido de ELE, tan alejado de los sonidos a los que está habituado?
(R.) – Creo que funcionamos muy bien juntos. Puede ser algo diferente, pero en cuanto escucha mis canciones, sabe perfectamente a dónde llevarlas. Él tiene ese don, completar las canciones de manera magistral. Pablo quiso que probáramos sonidos diferentes, que diera un paso más (o más de uno) en mis composiciones, más allá de lo que fue «Summer Rain«.
Para mí «What Night Hides» es un disco completo, donde la orquesta lo envuelve casi todo de una manera especial. Te lleva por varios estados de ánimo sin perder la unidad.
(P.) – Y sin desviarnos demasiado de esa unión entre ELE y Pablo Cebrián. En plataformas digitales nos encontramos ‘Not Slaves’ un tema que compartes con el alicantino Nach, pero nos gustaría profundizar un poco más en esta colaboración. Sabemos que el vídeo está grabado por Craneo Media pero ¿cómo se origina la idea tanto de la colaboración como del posterior videoclip?
(R.) – La idea de juntarnos nace de Pablo efectivamente. Me dijo de componer algo, a Nach le gustó mucho y quiso colaborar. Luego Pablo hizo su magia.
Y hablado del vídeo que acompaña a ‘Not Slaves‘, me hacía ilusión que fuesen dos bailarines quienes contaran nuestra historia. Manuel Segovia, director de una compañía de baile, no dudó en unirse al proyecto y crear la coreografía tan maravillosa del videoclip. La verdad que él hizo posible que nuestra idea se materializase. Eligió a los bailarines, Ángel Montes y Camille Balcaen, talento absoluto, y trabajó con ellos hasta el día de la grabación. Así fue, una suerte absoluta.
(P.) – Pero una cosa es grabar un álbum con parte de la orquesta de Abbey Road y otra cosa diferente es llevarlo al directo ¿qué nos podemos encontrar en un directo de ELE?
(R.) – Todo es adaptable, aunque por ahora hemos llevado una pequeña orquestación a la presentación y a algún directo. Por ejemplo, el 1 de Junio todos aquellos que vengan a vernos podrán ver al equipo al completo. La banda más la orquesta y alguna sorpresa más.
Cuidamos hasta el último detalle en nuestros directos, o eso intentamos. La gente acaba formando parte del show, se crea un conexión preciosa con el público y creo que sienten lo mismo que nosotros sentimos encima del escenario, o eso también intentamos.
(P.) – Si nos fijamos en lo que triunfa en este país nos encontramos, básicamente, a productos destinados a un consumo rápido, músicas masticadas de fácil escucha ¿Por qué crees que desde los medios más accesibles no se apuesta por una música original e inédita? ¿Crees que es un problema con solución o bien que todo lo que no sea pop comercial está destinado a girar en circuitos más underground?
(R.) – Creo que hay público para todo y para todos. Está claro que mi música puede que no llegue nunca a «masas» pero tampoco es lo que pretendo. Simplemente buscamos que la gente que le guste la música quiera disfrutar de lo que hacemos, acompañarnos en el viaje e ir escribiéndolo con nosotros.
(P.) – En la actualidad las artes en general están denostadas en el sistema educativo e incluso muchos pensamos que se trata de anular el talento y sobre todo el pensamiento crítico. Como docente ¿crees que hay esperanza para el Arte o en un par de décadas no seremos más que robots programados?
(R.) – Una visión muy cierta de lo que está pasando. Es una pena, cuando la música desarrolla la mente de manera global, a un nivel que no todas las destrezas lo consiguen. Genera sensibilidad, empatía, apertura de ideas, necesidad de investigar, enriquece el mundo interior de cada uno. La música está en la vida de todos, es curativa. A pesar de no ser tan valorada en el sistema educativo, en general, confío que se le de su espacio merecido, que se trabaje adecuadamente y podamos seguir desarrollando mentes futuras.
El que quiera ser un robot, que lo sea. Tenemos miles de herramientas para no tomar ese camino.
Os recordamos que las entradas para la presentación de «What Night Hides» dentro de este Elas Son Artistas ya se encuentra a la venta en este enlace. También se encuentran disponibles (aquí) las entradas y los diversos abonos para los diferentes eventos programados dentro del festival.