Repaso rápido a la mochila ¿Cámara de fotos? Ok ¿Objetivo? Ok ¿Tapones? Ok… Sí, tapones porque esta noche nos vamos a ver Havalina a La Fábrica de Chocolate y como no es la primera vez que asistimos a uno de sus conciertos sabemos que nos vamos a enfrentar a un show contundente y muy difícil de definir. Porque si el sonido y el concepto de Havalina era difícil de definir tras el lanzamiento, este año de «Muerdesombra» los madrileños han rizado el rizo.
«Muerdesombra» mantiene el tono oscuro de sus trabajos anteriores pero profundiza más en sonidos más electrónicos y que comparten presencia con las guitarras marca de la casa. Un trabajo que llevamos más de seis meses esperando descubrir en vivo por estas tierras. La banda tenía anunciados diversos conciertos para el mes de abril que se han retrasado hasta este octubre por diversos motivos.
Así que sin miramientos el trío, encabezado por Jaime Olmedo, tomaba el escenario de La Fábrica de Chocolate y sin miramientos sonaba ‘Abismoide‘, tema con el que también comienza «Muerdesombra«. Sí, son Havalina pero ahí algo diferente ¿será ese toque bailable? Un toque bailable que volaban de un plumazo al ritmo de ‘Más Velocidad‘, porque sí, Havalina ha evolucionado pero sin dejar de ser ellos mismo.
Como trileros, de nuevo bajaban nuestras pulsaciones al ritmo de ‘Órbitas‘ y debo decir que, si bien no tenía fe en este último trabajo de la banda, en directo, me comenzaba a conquistar.
Quince años sobre los escenarios dan para mucho y la revisión al pasado comenzó con ‘La Voz de Él‘ aunque no fue hasta ‘Norte‘ en la que el público dejo de mover sus cabezas para comenzar a cantar a todo pulmón. No hay duda, un lustro más tarde ‘Norte‘ sigue siendo un himno que te golpea el pecho una y otra vez.
Tras dejar el norte, no buscamos el sur sino que recalamos en «Islas de Cemento» de la mano de ‘El Olmo Centenario‘ y ‘Dónde‘ y desde allí regresamos al presente con ‘Nacidos de la Bruma‘, ‘Lazos Rotos‘ y ‘Alta Tormenta‘… «Muerdesombra» sonaba en todo su esplendor y con toda su contundencia.
La llegada de ‘Objetos Personales‘ supuso para mí una nueva experiencia. Lo reconozco, ese tema es uno de mis temas favoritos de la banda así que decidí disfrutarlo al 100% y quitarme por primera vez en el concierto los tapones. En ese momento la nitidez de la vocal de Cabezalí se perdió entre el estruendo de las guitarras. A priori pensé que se podía tratar de un problema personal, no estar acostumbrado al volumen del concierto, pero al final del concierto el comentario era extendido: estaba demasiado alto.
El tramo final del concierto venía encabezado por ‘Malditos Mamíferos‘ que daba paso a otro de los grandes temas de la banda: ‘Viaje al Sol‘, que precede a ‘Incursiones‘. Ya no hay lugar a la calma y La Fábrica de Chocolate baila en un estado muy cercano al trance de los loops que la guitarra de Cabezalí lleva creando en los últimos minutos.
‘Trópico Fantasma‘ ponía fin al concierto de la misma manera que pone fin a este «Muerdesombra» que los madrileños por fin presentaban por estas latitudes. Aplausos y vítores mientras la banda abandonaba el escenario para minutos más tarde poder regresar de nuevo a hacer algunos temas más. Con el primero de ellos viajábamos hasta el ‘Desierto‘ de las «Las Hojas Secas» para proseguir con la esa oscura y contundente ‘Imperfección’ que se enlazaba con ‘El Estruendo‘ formando un fin de fiesta apabullante al más puro estilo Havalina.
Impecables en su ejecución a medio camino entre el rock y el metal. Casi dos horas de energía que te golpea el pecho en estado libre. Casi dos horas de Havalina.
[Extra ball]
Premio al Tonto del Concierto
En esta ocasión el Premio al Tonto del Concierto será un galardón compartido (un cachito de la estatuilla virtual para cada) entre las dos chicas que mientras sonaba ‘Viaje al Sol‘ se abrieron paso a empujones hasta la primera fila, evidentemente sin pedir perdón a quienes arrollaron en su caminar, para arrodillarse en el suelo y así poder tener un selfie con Manuel Cabezalí detrás. Bra-vo