Cinco chicos y un mono furioso buscan abrirse un hueco en la escena musical española. Y a ese paso, lo van a conseguir. Nos sentamos con Mariña, Irene y el Mono Furioso: vocalista, guitarrista, y compositor/productor/músico de apoyo de la banda Furious Monkey House. Un grupo que busca conquistar a todo el mundo a base de ritmos rockeros en la línea de Pixies con la carisma e inocencia propia de unos chicos de 12 años.
(Pregunta) ¿Cuáles son vuestras principales influencias y cómo decidisteis volcar este sonido en vuestro estilo propio?
(Respuesta) Mariña: Hay muchos grupos de rock que nos gustan como Green Day, y queríamos movernos en una onda como esa, hacer música que nos gustase, algo nuevo para nosotros y aprender con este proyecto que estamos montando. Creo que todos tenemos nuestro estilo personal, pero tenemos muchísimo en común.
(P) ¿Quién se ha encargado de la producción de vuestro disco?
(R) Mono Furioso: La producción del disco la lleva a cabo Gonzalo Baseira con la ayuda de Yago Lorenzo.
(P) ¿Cómo es el proceso de composición de vuestras canciones?
(R) Irene: Depende de la canción, pero las hacemos entre todos habitualmente. Las letras las hacemos nosotros y luego el Mono Furioso las pasa al inglés. Empezamos con las melodías e intentamos sacar otra melodía lírica, vamos construyendo.
(P) Me resulta llamativo como mezcláis temáticas más densas como en ‘Hey Girl’ o ‘Exploding Head’, con otras de un carácter más infantil como ‘Little Noisy Bunny’ o ‘Rock Candy’. ¿Habéis querido llevar una misma línea argumental a lo largo del disco o han sido letras que han ido surgiendo sin más?
(R) Mono Furioso: Las últimas que mencionas son las primeras canciones que compusimos, y es cierto que en esos temas decidimos a modo juego la forma de componerlas.
‘Rock Candy’ surgió cuando nos estábamos comiendo unos sugus en el local de ensayo y dijimos: “Vamos a hacer una canción para el caramelo más rockero del planeta”. Y ‘Little Noisy Bunny’ surgió porque Mariña quería hacer una canción de algo que fuera muy tierno dijimos que sería un conejito que iba a ser malo, iba a coger la batería y liarla parda.
Es cierto que hay canciones donde nos pilló un poco el toro y metí cosas mías, personales, pero siempre comentándolo con ellos. Es un trabajo de todos al final.
(P) ¿Cuál es la historia detrás del grupo y del nombre?
(R) Mariña: Al Mono Furioso le gustan mucho los monos, está obsesionado. Entonces pensó que el grupo que quería montar con niños tenía que ser algo con monos. Le estuvo dando vueltas y se le ocurrió Furious Monkey House, nos gustó a nosotros y así se quedó.
(P) Mono, ¿buscabas crear un grupo con niños o surgió a raíz de ver a los que tenías en tu banda?
(R) Mono: Fue todo fruto del azar. De hecho, esto salió a partir de un proyecto educativo de aprender música a través de la propia experiencia en lugar de hacerlo con las canciones de otros, como es habitual. Era una apuesta mía para Carlota e Irene, mis alumnas particulares. Quería motivarlas de alguna forma, y decidimos hacer canciones en las que se metían conmigo, la mejor forma para que se pusieran las pilas (Risas). Acabaron practicando más con sus canciones que con las de otros. A partir de ahí y de otras actividades fui cogiendo a chicos que estaban interesados en la música.
Pero simplemente era un proyecto para probar y ver qué salía de ahí. Nació como experimento y poco a poco fue cogiendo carrerilla con las ganas que pusieron ellos, por lo motivados que estaban y por lo bien que funcionaban las canciones.
(P) ¿Por qué el anonimato del mono?
(R) Mono: Porque creo que un adulto no tiene sentido dentro del universo de los niños tocando. Teniendo una careta y saltando por el escenario soy uno más. Si no tuviese una careta sería eso que empieza a sonar por ahí: un explotador (Risas). Pero con la careta formo parte del grupo y es más divertido, un mono loco.
(P) Leí que habías grabado este disco en los Abbey Road, ¿cómo surgió la oportunidad de grabar en ese estudio?
(R) Mariña: El Mono, cuando era más joven, fue a California a tocar con un grupo anterior y fue una experiencia que le marcó y donde aprendió mucho, y quería que tuviéramos una experiencia tan grande, en este caso, ir a Abbey Road. Así que después de darle muchas vueltas y consultarlo con nuestros padres, fuimos allí a grabar.
(P) ¿Habéis dado vuestros primeros conciertos? ¿Cómo es la sensación del directo?
(R) Maria: Es muy divertido. Los primeros conciertos si son más difíciles, pero pasado el tiempo ya solo tienes ganas de disfrutar en el escenario y se te pasa todo. Es divertidísimo estar con tus amigos tocando y cantando.
Mono: El 13 de febrero tenemos un concierto en el teatro Lara y va a ser un concierto en el que vamos a asustar a la gente, es nuestra misión. Al principio va a parecer que somos unos chicos muy buenos y cuando menos se lo esperen vamos a despeinar de la primera a la última fila. Para que digan: “Caramba con los niños de Pontevedra”.
(P) ¿Cómo estáis compaginando la música y los estudios?
(R) Irene: Pues organizándonos. Yo tengo waterpolo, música y tengo que estudiar. Si organizas bien el tiempo aprovechándolo bien acabas compaginándolo también bien. Estamos ahora mismo entre 6º de Primaria y 2º de la ESO, de momento no vamos mal.
(P) ¿Os imagináis continuando el proyecto en un futuro?
(R) Mariña: Yo tengo muchas ganas y mucha ilusión de seguir este proyecto. Diversión, experiencia y aprendizaje. Mientras podamos compaginarlo con nuestros estudios y nuestro tiempo libre, sin problema. Creo que es lo máximo.
(P) ¿Sentís presión o agobio al aparecer en entrevistas en medios de comunicación?
(R) Mariña: Agobio no, pero sí sorpresa al pensar que hace un poquito menos de dos años estábamos aquí empezando un proyecto pequeño que jamás íbamos a pensar que iba a acabar en algo tan grande. Sientes emoción, y al principio nervios, pero más tarde se te pasa todo.
(P) ¿La edad os ha supuesto un handicap o ha sido todo ventajas?
(R) Mono: Es un proyecto difícil de trabajar: no puedes plantear una gira como con un grupo de adultos, yo también tengo colegio por la mañana… Hay muchas responsabilidades y esto se plantea como un proyecto extra al aprendizaje que no nos influya en nuestro día a día. No podemos hacer una gira de dos meses tocando todos los fines de semana. Podremos dar dos conciertos al año y actividades que creo que pueden beneficiar a que el proyecto crezca en el sentido que le queremos dar.
(P) Me llama la atención que tenemos una escena musical muy joven, por un lado tenemos a bandas como Mourn, de chicos de 17-19 años de Barcelona, o vuestro caso, que os movéis por un ambiente más rockero, y luego otros artistas más jóvenes que salen de factorías al panorama comercial. ¿Qué opináis de estas diferencias y de estos jóvenes artistas del ambiente más comercial que, de alguna manera, están más “explotados”?
(R) Mariña: La música es algo muy importante en nuestras vidas. Estos grupos (del ámbito comercial) tienen talento, pero no escriben sus canciones o no saben tocar sus instrumentos como nosotros a tan corta edad.
Mono: Todo estilo musical es respetable e incluso da igual que toques o no toques, hagas lo que hagas esto es un país libre y cada uno puede hacer el estilo que le dé la gana y cualquier estilo vale. ¿Qué pasa? Que no estoy de acuerdo con cómo se vende la imagen de estos artistas o la sobreexposición mediática a la que se someten para hacer que la gente se trague cualquier cosa que hagan por televisión, nos tratan como si fuésemos borregos.