por El Festival de Cinema Fantàstic de Sitges abrió sus puertas ayer viernes día 9 de octubre y con éste, sus cinco salas de cine oficiales en las que se proyectarán hasta el domingo 18 más de 160 películas. La gala de inauguración la protagonizó la película ‘The Witch’ de Robert Eggers, que concluyó en un mar de aplausos y ovaciones por parte de su público. A la gala le siguió la visita del director danés Nicolas Winding Refn (‘Valhalla Rising‘, ‘Bronson‘, ‘Drive‘…)
‘The Witch’ es una película seria como ella misma que te introduce en una atmósfera de religión, miedo, soledad y terror en la época de los colonos ingleses en las tierras vírgenes de Norteamérica, cuando los nativos aun campaban libremente y los árboles susurraban historias, la magia flotaba en el ambiente y la brujería era perseguida como una práctica demoníaca. Parte de la siniestra tensión que emana es por su ritmo pausado, su música escalofriante y su ruptura con cualquier código tradicional del terror. El suspense rebosa de la tierra y la naturaleza, recordando en algún momento los misterios de ‘El Bosque‘, con la tensión y seriedad que podrías encontrar en el cine de Michael Haneke o las malas vibraciones que contagian ‘Anticristo’ de Lars Von Trier. ‘The Witch’ se ha consagrado como un clásico instantáneo del terror, una cinta obligatoria del tamaño que fueron ‘Alien’ o ‘El Silencio de los Corderos’ pero con fuertes influencias del cine europeo y sobre todo, mucha clase.
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El resto del festival me lo monté por mi cuenta, ya que las opciones disponibles eran infinitas. La sala Auditori es la más enorme de toda la ciudad y reservada a los grandes estrenos y a aquellas que están en Competición Oficial. Allí pues, disfruté de la última obra de Paco Cabezas, ‘Mr.Right’, una bonita historia que podríamos llamar (coloquialmente) comedia romántica pero que en ningún momento coge un tono empalagoso. De hecho, la historia es bastante simple, a ratos roza el absurdo y resulta repetitiva también, aunque no por ello la película permanece plana. Todo en ella es una odisea sobre la violencia, el amor y sobre todas las cosas, el sentimiento de estar en una sala de cine y pasarlo genial.
En mi paso por la Sala el Prat vi dos proyecciones seguidas, ‘Entertainment’ de Rick Alverson y ‘Blind Sun’ de Joyce A. Nashawati, dos películas que no tienen nada que ver (la primera, un retorcido viaje surrealista a través de la triste vida de un cómico, y la otra, un retrato sobre la soledad y ansiedad de un inmigrante) y que ambas comparten un tremendo estilismo y potente ritmo así como un tono experimental y de autor pero que, conforme avanzan, resultan cansinas y aburridas por su perezoso tono.
De momento, el festival se presenta con una oferta inigualable de proyecciones con multitud de cintas de terror, pero también muchísimas historias de misterio, thrillers y suspense. El tener ‘Se7en’ como referente indica que este año se abrazan muchísimo más la intriga y la tensión, los sudores fríos y calambres por delante del susto y los gritos. Sin duda, una edición interesante y que ha empezado decididamente con buen pie.
La película ‘The Witch’ aún no tiene fecha en España, pero llegará a comienzos de 2016 a Estados Unidos. ¡No le pierdas la pista!
