por Una tarde más nos volvimos a acercar al Teatro Fernán Gómez llamados por su programación, y más concretamente por la obra de Otelo a Juicio. Se trata una de las obras que abre esta nueva temporada de la programación teatral del Fernán Gómez, dirigida por Ramón Paso cogiendo como guión la gran obra de Shakespeare.
Hay muchos tintes que Paso puede extrapolar de esta obra universal de la literatura para trazar una historia contemporánea: violencia, envidia, avaricia, difamación… Haciendo una obra tan enriquecedora, gracias a que las historias de las dos épocas suceden de manera simultánea sobre el mismo escenario, intercalando tiempos y pasajes: por un lado, en un bufete de abogados, Otelo confiesa que ha asesinado a su mujer; por otro, la interpretación de la fábula del Otelo clásico. Y todo ello gracias a las extraordinarias interpretaciones de los actores.
En ese bufete de abogados se presenta Otelo (Francisco Rojas) con un arrepentimiento, recibido por una becaria (Ángela Peirat) que le hará esperar mientras llama a la astuta e inteligente Silvia (Ana Azorín), quien está al frente del despacho. Silvia es ambiciosa y quiere triunfar en un sector predominado por hombres. Su inteligencia le hará estirar los límites de los códigos legislativos al igual que hará llegar a Otelo a sus límites.
En la otra cara de la historia, nos transportamos a la historia del siglo XVII donde Otelo, general moro de Venecia, cuyo amor por Desdémona (Inés Kerzan) es declarado, y ella termina enamorándose y casándose con él, a pesar de estar esta acción en contra de las recomendaciones de su padre. Sin embargo, no todo será un camino de rosas para Otelo, ya que Yago (Jorge Machín), su alférez, será quién trence un plan vengativo que se llevará por delante a Casio (Jordi Millán).
Imagen extraída de la web del Teatro Fernán Gómez
Por tanto, en esta confluencia de tiempos y personajes, la obra enlaza la tragedia con la realidad de nuestros días, donde las interpretaciones de sus personajes nos hacen mantener la tensión ante la exposición de los diferentes sentimientos vividos en escena. No queremos revelar mucho más al espectador ya que aún puede disfrutar en el teatro Fernán Gómez en esta última semana de interpretación (hasta el próximo domingo 14 de octubre). Acércate porque merece la pena.
