Braxton Cook, el multiinstrumentista y productor formado en Juilliard, nos presenta «My Everything«, un EP que se vende como una inmersión en su vida personal, equilibrando su faceta musical y familiar. Sin embargo, lo que encontramos es más un catálogo de sus habilidades técnicas que una exploración emocional profunda. Si bien Cook demuestra su virtuosismo en varios géneros, el EP se siente disperso y carente de una identidad cohesiva.
«My Everything» pretende ser un homenaje a la música afroamericana, fusionando jazz, R&B, neo-soul y hip-hop. En temas como ‘Zodiac‘ y ‘My Sun‘, Cook exhibe su destreza en el jazz con tempos rápidos y solos de saxofón electrizantes, recordando a figuras como Kamasi Washington o Terrace Martin en sus momentos más frenéticos. La colaboración con Elijah Fox en ‘My Sun‘ añade una capa de producción sofisticada, pero no logra elevar la canción por encima de un mero ejercicio de virtuosismo. Por otro lado, en ‘Weekend‘ y la canción principal, ‘My Everything‘, Cook se adentra en el R&B alternativo, con la colaboración de la cantante suiza de soul NNAVY en la primera. Aquí, las influencias de D’Angelo o Frank Ocean son evidentes, pero la ejecución se siente demasiado programada, sin la crudeza emocional o la experimentación sonora que caracterizan a estos artistas.
Cook afirma que este EP es una representación honesta de las vicisitudes de la vida y de su estado de ánimo cambiante. Sin embargo, las letras se quedan en la superficie de la confesión, sin llegar a profundizar en las emociones que pretenden transmitir. En la canción principal, ‘My Everything‘, se aborda la confusión y los conflictos del crecimiento, pero con un lenguaje genérico y poco evocador. La intención de inspirar y recordar que «todo siempre mejora» se siente como un cliché motivacional más que como una reflexión genuina. La conexión con la «Zodiac Suite» de Mary Lou Williams, aunque interesante conceptualmente, no se traduce en una propuesta musical que realmente dialogue con la obra de la pianista.
La producción de «My Everything» es indudablemente pulida y profesional. Se nota el cuidado en los arreglos y la mezcla, pero esta misma pulcritud acentúa la falta de cohesión entre los temas. El EP se siente como una colección de canciones inconexas, cada una explorando un género diferente, pero sin un hilo conductor que las una. La transición entre los temas de jazz instrumental y las canciones de R&B vocal se siente abrupta, interrumpiendo el flujo de la escucha.
«My Everything» es un EP que muestra las habilidades de Braxton Cook como instrumentista y productor, pero que se queda corto en cuanto a la propuesta artística. La falta de originalidad en las letras y la dispersión estilística impiden que el EP alcance su potencial. Braxton Cook tiene el talento para crear algo realmente significativo, pero en este EP se conforma con mostrar lo que sabe hacer, en lugar de arriesgarse a explorar nuevos territorios.