Villanueva nos sumerge en un universo oscuro y cautivador con «Gallo Negro«, un álbum que transita entre la realidad y la ficción, explorando temas profundos como la identidad, la culpa y la redención.
Este nuevo trabajo de Villanueva representa una evolución significativa en su carrera, alejándose de las baladas más intimistas que lo caracterizaron en discos anteriores. «Gallo Negro» es un álbum conceptual, una ópera rock que cuenta la historia de una maldición y sus consecuencias, todo ello envuelto en una atmósfera oscura y melancólica.
Musicalmente, el disco es una fusión de diversos géneros, desde el rock y la cumbia hasta la chacarera y la ranchera. La producción de Juanma Latorre aporta una riqueza sonora que envuelve al oyente en un ambiente envolvente y cinematográfico. Las guitarras, los vientos y las percusiones se entrelazan creando un tapiz sonoro que acompaña a la perfección la narrativa del álbum.
Las letras de Villanueva son el corazón de este proyecto. A través de ellas, el artista nos sumerge en un universo lleno de simbolismo y referencias literarias, como la obra de Nietzsche. La historia del Gallo Negro es una metáfora de la lucha interna, de la dualidad del ser humano y de la búsqueda de la redención.
«Gallo Negro» es un álbum que provoca una amplia gama de emociones. Desde la angustia y la desesperación hasta la esperanza y la redención, el oyente se ve envuelto en un viaje emocional intenso. Las canciones son como escenas de una película, cada una aportando una pieza al rompecabezas de la historia.
Si bien este trabajo es una evolución respecto a sus trabajos anteriores, se mantiene fiel al estilo de Villanueva. Las letras introspectivas y la búsqueda de la identidad siguen siendo elementos clave en su obra. Sin embargo, en este álbum, el artista se adentra en un territorio más oscuro y experimental, creando un universo sonoro más rico y complejo. Un trabajo ambicioso y arriesgado que consolida a Villanueva como uno de los artistas más interesantes de la escena musical española.