IAMTHELIVING, el proyecto de Rian Peters, llega con su álbum debut «Nebra Sky«, prometiendo una revitalización de las texturas del soul clásico para el oído moderno. Sin embargo, lo que encontramos es un cielo nebuloso, donde las influencias, aunque evidentes, no logran converger en una propuesta con la suficiente fuerza y originalidad para destacar.
«Nebra Sky» se presenta como un homenaje a los grandes del soul y el funk, con nombres como Michael Jackson, Prince, Stevie Wonder, Marvin Gaye y James Brown como claras referencias. Se percibe una intención de capturar la energía y el groove de estas leyendas, con ritmos bailables, líneas de bajo funk y arreglos que buscan la calidez del sonido analógico. Sin embargo, la ejecución se siente a menudo como una imitación superficial, sin la pasión visceral o la innovación que caracterizaban a estos artistas. El enfoque en «revivir texturas clásicas» termina sonando como un ejercicio de estilo, donde se replica la forma sin capturar la esencia. Si bien temas como ‘The Weekend‘ intentan inyectar una dosis de energía funk, se quedan en un terreno predecible, sin la sorpresa o la experimentación que se esperaría de una propuesta que busca «rebranding» del género.
El álbum se centra en transmitir «energía positiva» y un mensaje de esperanza y resiliencia. Las letras, aunque bienintencionadas, se quedan en un terreno genérico, sin ofrecer una perspectiva original o una reflexión profunda sobre las experiencias humanas. Se habla de superar obstáculos, de encontrar la luz en la oscuridad y de la importancia de la conexión, pero con un lenguaje que carece de la fuerza poética o la crudeza emocional que se necesita para conmover al oyente. La colaboración con artistas como Kitt, Knomadic y Braxton Cook, aunque añade variedad al álbum, no logra elevar el nivel lírico.
La producción de «Nebra Sky» es indudablemente pulida y profesional. El sonido es limpio y equilibrado, con una mezcla que busca la calidez del soul clásico y la precisión de la producción moderna. Sin embargo, esta misma pulcritud acentúa la falta de una identidad sonora definida. El álbum se siente como un conjunto de canciones inconexas, cada una intentando replicar un aspecto diferente del soul y el funk, pero sin un hilo conductor que las una. La influencia de productores contemporáneos como Mark Ronson o Bruno Mars es palpable, pero IAMTHELIVING no logra encontrar un sonido propio que lo distinga de estos referentes.
«Nebra Sky» se presenta como un nuevo comienzo para IAMTHELIVING, una muestra de su «ambición progresiva y con un atractivo más comercial». Sin embargo, lo que encontramos es un cielo nebuloso, donde las influencias se mezclan sin generar una luz propia. Rian Peters demuestra tener talento musical y una clara pasión por el soul y el funk, pero necesita arriesgar más y encontrar una voz propia que lo distinga de la multitud de artistas que buscan revivir estos géneros.