Hace un par de días nos sentamos con Jorge Lorenzo y Braulio Vidal, voz y bajo respectivamente de Winter Project para hablar de «Paranoid Lullaby«, una pequeña joya que nos traslada a mundo de sueños y pesadillas.
Pero para quienes no los conozcáis Winter Project son una banda afincada en Vigo a la que descubríamos gracias a «Winter Time«, un trabajo con el que la banda se presenta en sociedad y que nos mostraba la cantidad de registros que podían llegar a cubrir: desde el jazz hasta la música más psicodélica propia de los 60. En gran medida este amplio espectro surge de las inquietudes individuales de quienes forman Winter Project: sin ir más lejos Braulio provine de jazz, mientras que Jorge llega con sonidos más propios del post-punk bajo el brazo. Todo ello convertía a «Winter Time» en un trabajo ecléctico e incluso difícil de catalogar.
Casi un año y medio más tarde la banda nos sorprendía con «Paranoid Lullaby«. La sorpresa no se encontraba en la edición de un nuevo trabajo sino en el contenido del mismo, y es que Winter Project cambia completamente, o en gran medida, de registro. Con «Paranoid Lullaby» Winter Project nos sumerge en un mundo de ensoñaciones donde los teclados nos guían a través de los territorios de la psicodelia y el rock progresivo, unos mundos donde la voz deja paso a cuidadas estructuras instrumentales convirtiéndose en una parte más del conjunto.
Así que era el momento de preguntar ¿a qué suena Winter Project?
(Jorge) – Winter Project está a medio camino entre «Winter Time» y «Paranoid Lullaby«. Cada uno de nosotros: Braulio, Pablo (el nuevo guitarrista de la banda) o yo venimos de lugares diferentes, con ideas diferentes y gustos diferentes. Estas ideas y gustos los volcamos en Winter Project donde todos componemos y todos somos participes de las canciones.
(Braulio) – «Winter Time» es propiamente un álbum, un álbum de fotos. Tú cuando abres un álbum te encuentras muchas fotos: fotos de bebé, la mítica foto de la primera comunión, algunas fotos de la adolescencia… «Winter Time» es así. Temas más cercanos y algunos otros más lejanos en el tiempo.
(Jorge) .- Se podría decir que hemos hecho las cosas al revés y que «Winter Time» se podría considerar un grandes éxitos (Risas)
Y tras «Winter Time» nos hemos topado con «Paranoid Lullaby«. Un EP que no tiene poco o nada que ver con «Winter Time» ¿cómo surge este nuevo trabajo?
(J.) – Pues aunque no lo creas fueron dos trabajos que nacieron a la vez. Los temas que forman «Paranoid Lullaby» bien podrían aparecer dentro de «Winter Time«.
(B.) – «Paranoid Lullaby» nos lleva a un mundo onírico. Es mucho más progresivo y conceptual así que decidimos hacerle un EP propio separándolo así de «Winter Time«.
(J.) – Sí, sin duda «Paranoid Lullaby» es muy atmosférico. Es un trabajo más de melodías que de letras.
(B.) – En él caminamos en el mundo de los sueños y las pesadillas, por eso su título «Paranoid Lullaby«: situaciones en las que no sabemos qué es real o qué nos hemos imaginado.
(J.) – Como cuando estás apunto de dormir, que ves imágenes borrosas, no sabes muy bien qué es real o qué es fruto de tu imaginación.
Parece entonces que «Paranoid Lullaby» nació como un capricho ¿cómo fue la grabación?
(J.) – Impresionante. No se puede definir de otra manera.
(B.) – Lo grabamos en una sola toma en directo. Te voy a contar más, grabamos cuatro tomas para seleccionar la mejor y nos quedamos con la primera. Nos reunimos en el estudio y nos dejamos llevar.
Me ha llamado la atención que durante el café previo a esta entrevista os habéis referido a «Paranoid Lullaby» como un EP de tres canciones pero cuando lo he metido en mi reproductor me he encontrado que son cuatro pistas y creo que eso tiene una explicación así que…
(J.) – ¡¡¡Yo no lo quería separar!!! «Cortar» este tema se debe a la necesidad de inmediatez.
(B.) – Encontramos una primera parte que hace de intro que se basa en la melodía del piano y que te va situando pero que quizás mucha gente puede considerar lenta, por ello hemos decidido separarla.
(J.) – Es como encontrarse una canción de tres minutos en el medio del tema.
(B.) – Es más yo la hubiese separado en tres partes aislando la nana final.
Entonces, ¿cuál es la verdadera cara de Winter Project? ¿»Winter Time«? ¿»Paranoid Lullaby«?
(B.) – Winter Project es tanto «Paranoid Lullaby» como «Winter Time«. Pensamos que todo tiene su momento y así se lo transmitimos a aquellos que vienen a nuestros conciertos.
(J.) – Sin duda nuestro próximo trabajo caminará entre ambos discos.
Ya que habéis hablado de conciertos ¿Qué nos podemos encontrar en ellos?
(B.) – En los conciertos podemos encontrar la mayoría de nuestro repertorio y un par de versiones. Me llama la atención la reacción del público con ‘Paranoid Lullaby‘. Sin duda es un tema psicodélico y la gente no consume psicodelia… me llama mucho la atención.
Entonces entiendo que la acogida de «Paranoid Lullaby» ha sido mejor de lo que cabría esperar para un trabajo tan delicado
(B.) – Pues sí, la recepción por parte del público ha sido muy buena. Incluso hemos recibido un feedback muy positivo fuera de nuestras fronteras.
Braulio, no nos dejes con las ganas, cuéntanos…
(B.) – Hace unos meses nos llegó un correo de un hombre que nos decía que era de una emisora canadiense y que a través de las plataformas digitales había encontrado «Paranoid Lullaby«. En él nos preguntaba si podía radiarlo.
(J.) – Claro, al principio no nos creímos nada pero buscando en internet resulta que sí, que en Canadá hay una emisora especializada en psicodelia.
(B.) – ¡¡¡Por supuesto que le dimos permiso!!! ¡¡¡Hicieron un programa especial donde pasaron ambos discos!!!
Antes comentábamos que el siguiente trabajo de Winter Project transitaría entre «Winter Time» y «Paranoid Lullaby» ¿cuales son vuestros planes de futuro?
(J.) – Sí, ya estamos trabajando en el siguiente disco. Ya está compuesto y esperamos entrar a grabar a finales de año. Además tanto en «Winter Time» como «Paranoid Lullaby» hemos hecho de productores y ahora, en este tercer trabajo, hemos decidido ponernos en manos de un productor artístico que nos diga hacia donde puede seguir nuestro sonido.
(B.) – Como ya ha dicho Jorge el disco está compuesto, ahora estamos buscando un sonido propio, quizás sin dejarnos llevar tanto por influencias, y más coherente. Queremos hacer un álbum más ambicioso tanto a nivel profesional como artístico.
Y para terminar, cómo veis el futuro de la industria musical.
(J.) – Ufff, es un tema realmente complicado. Ahora mismo, con las plataformas digitales, YouTube y los medios de comunicación un chaval de 17 años tiene tal cantidad de información y de grupos que hace que pierda curiosidad por lo que hacen en el local de ensayo de la acera de enfrente porque hay cuatro bandas que le venden constantemente en los medios.
Es complicado porque teniendo acceso a todo solo se les muestran cuatro bandas, el resto es como si no existiese. No es que no guste, es que no tienen tiempo a conocerlas. Las plataformas digitales están muy bien pero tienes que saber que ese grupo existe.
Se ha perdido el hábito de ir a la tienda y curiosear entre los discos. Además creo que estamos en un momento muy cambiante, si me apuras ya no sabes en qué formato sacar tu propio disco. Incluso he pensando en sacarlo en pen drive, que hay gente que no tiene donde poner un CD.
Totalmente de acuerdo, yo soy uno de ellos.
(B.) – Ahora lo que hay es muchas formas de plantear el acceso a la música. Antes había el filtro de las discográficas y había un solo modo de hacerte con un disco que era ir a la tienda de turno y comprarlo. Tengo el recuerdo de hacer colas enormes para comprar el último disco de tu grupo favorito, cosa que hoy en día no sucede y te lo digo yo que todas las semanas paso por mi tienda de discos a ver si encuentro algo.
(J.) – También es cierto que a nosotros nos viene bien este acceso tan cómodo a la música porque llegamos a lugares que nunca habríamos pensado en llegar, como a una emisora de Montreal.