por Nada más dar al play del nuevo disco de Kings of Leon escuchamos el rasgueo de la guitarra de Matthew y el bajo de Jared que nos transportan melancólicamente al inicio de las clásicas canciones de rock de los 80’. “We Are Like Love Songs”, abreviado “WALLS”, es el séptimo longplay de la banda, formada por los tres hermanos Caleb, Nathan y Jared Followill y su primo Matthew Followill.
Se ve de forma clara que se sienten cómodos con los ritmos sencillos y rockeros, con un gran dominio de la guitarra eléctrica que ya habíamos escuchado en alguno de sus álbumes como en “Mechanical Bull”, que salió hace tres años. Muchos son los que afirman que cambiar a su antiguo productor por Markus Dravs (también productor de otras grandes bandas en la actualidad como Coldplay o Florence + the Machine) ha sido una de sus mejores opciones para crear un disco con algunas de sus mejores canciones en años.
El LP presenta un total de diez temas, todos escritos por los cuatro miembros de la banda. El primer sencillo es ‘Waste a Moment’ que desde que empieza aterriza con mucha fuerza con tan sólo unos pocos acordes de guitarra. Le sigue ‘Reverend’ que también conmueve con intensidad aunque de forma más nostálgica. La tercera canción, ‘Around the World’, tiene un sonido que reconocemos en ‘Waste a Moment’, el último single del álbum. ‘Walls’ es en cambio una balada, mucho más melódica y tranquila que las tres mencionadas anteriormente.
La mayoría de sus letras hablan sobre el amor y el desamor, lo que da sentido al nombre del álbum “todos somos como canciones de amor”. En cambio, ‘Muchacho’ habla sobre el sentimiento de la amistad y con un ritmo más latino o caribeño.
Como algo positivo para aquellos a los que les gusten los anteriores trabajos de Kings of Leon, podemos destacar que no han cambiado demasiado su clásico estilo garage, indie rock que ya habían representado en otros álbumes. Lo negativo, que no hay un sonido innovador que destaque por encima de los demás.
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