febrero 12, 2025

Adiós a Sugar Man, fallece Sixto Rodríguez

Hoy, el mundo llora la pérdida de Sixto Rodríguez, un cantautor cuyo impacto cultural trascendió fronteras y barreras. Sixto Rodríguez, el icónico cantautor de folk rock, falleció a la edad de 81 años el pasado martes, 8 de agosto. Aunque su música pasó desapercibida en su país natal, Estados Unidos, su legado se forjó en rincones distantes del mundo, especialmente en Sudáfrica, donde su música se convirtió en un símbolo de resistencia contra el apartheid.

Rodríguez, hijo de un mexicano y una nativa americana, comenzó su carrera musical en la decadente Detroit de finales de los años 60. Sin embargo, sus álbumes debut, «Cold Fact» y «Coming From Reality«, apenas lograron reconocimiento en su tierra natal. A pesar de su talento innegable y unas letras que abordaban temas sociales y la dura realidad de su entorno en Detroit, Rodríguez optó por retirarse del escenario y vivir en el anonimato.

Sin embargo, lo que Rodríguez no sabía era que su música se había convertido en un fenómeno en países como Sudáfrica, Nueva Zelanda y Australia. Un documental, «Searching For Sugar Man,» lanzado en 2012 y galardonado con un premio Óscar, reveló su historia al mundo. Esta película rescató su legado y lo llevó a giras internacionales, convirtiendo su resurrección en un ejemplo agridulce de éxito tardío. El documental, dirigido por Malik Bendjelloul y estrenado en 2012, sigue la búsqueda de dos fanáticos sudafricanos, Stephen «Sugar» Segerman y Craig Bartholomew-Strydom, que tratan de encontrar información sobre la vida y la muerte de Sixto Rodríguez, a quien creen que se ha suicidado. A medida que profundizan en su investigación, descubren que Rodríguez, lejos de estar muerto, está vivo y lleva una vida sencilla en Detroit.

«Searching for Sugar Man» no solo brindó un merecido reconocimiento a la música y letras de Sixto Rodríguez, sino que también arrojó luz sobre el poder de la música para trascender barreras culturales y políticas y de la importancia de la conexión humana y la perseverancia en la búsqueda de la verdad y el reconocimiento.

Después de décadas de relativo anonimato, la historia de Sixto Rodríguez tomó un giro sorprendente. Aunque sus discos habían pasado desapercibidos en su país, sus canciones resonaron profundamente en Sudáfrica, un país luchando contra el régimen del apartheid. Los ciudadanos sudafricanos encontraron en su música un reflejo de sus luchas y aspiraciones, convirtiéndolo en una figura icónica de la resistencia.

A pesar de su repentina fama internacional, Rodríguez mantuvo una vida sencilla en su hogar en Míchigan. Siguió viviendo modestamente y donando gran parte de sus ganancias a causas benéficas. Sus canciones, impregnadas de las realidades sociales de su ciudad natal, mantienen su relevancia hasta el día de hoy.

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