por Pendulum, los titanes australianos del drum and bass, rompen su silencio con ‘Cannibal‘, un single abrasivo en colaboración con el dúo electro-punk londinense Wargasm, como adelanto de su cuarto álbum, «Inertia«, que verá la luz el 22 de agosto. Estrenado con un videoclip visceral dirigido por Chris Wade, que muestra a Rob Swire y Wargasm en una fábrica abandonada entre pantallas parpadeantes ), ‘Cannibal‘ es un asalto sónico que fusiona sintetizadores pesados, breaks frenéticos y la actitud punk de Wargasm. Pendulum regresa tras más de 5 años sin un álbum de estudio, recordándonos que el drum and bass puede ser tan visceral como cualquier riff de metal. Pero, ¿es ‘Cannibal‘, un himno revolucionario o un experimento que se queda en la superficie?
Pendulum, formados en Perth por Rob Swire, Gareth McGrillen y Paul Harding, son una fuerza seminal en la música electrónica, con tres álbumes de platino («Hold Your Colour«, «In Silico«, «Immersion«) y más de un millón de discos vendidos en el Reino Unido. Su sonido, que mezcla drum and bass con rock, metal y rave, los llevó a llenar arenas y encabezar festivales como Glastonbury, Download y Ultra Miami. Tras un hiato tras «Immersion«, Swire y McGrillen exploraron el electro-house con Knife Party, pero los EPs «Elemental» y «Anima» marcaron el regreso de Pendulum a sus raíces, con un giro más pesado y emocional. «Inertia«, producido por Swire y Owen Charles en su estudio londinense, promete ser su trabajo más personal, con 16 pistas que incluyen colaboraciones con Bullet For My Valentine, Joey Valence & Brae, y Hybrid Minds.
‘Cannibal‘ es un torbellino de cuatro minutos que combina los breaks característicos de la banda con el caos electro-punk de Wargasm, el dúo formado por Sam Matlock y Milkie Way. Las letras, escritas por Swire, Matlock y Way, destilan una energía primal: “Pretty, animal, international / Dirty dreams, dirty soul / Come on, baby, won’t you kiss me like a cannibal”. La voz de Milkie Way, cargada de rabia y seducción, se entrelaza con los alaridos screamo de Swire y los sintetizadores cortantes, creando un himno diseñado para escenarios masivos. La producción, impecable y visceral, lleva el sello de Swire, quien mezcla y co-produce, pero el tema puede sentirse sobrecargado, como si intentara abarcar demasiado en su ambición de fusionar géneros.
La colaboración con Wargasm, cuyos referentes incluyen a Atari Teenage Riot y The Prodigy, no es casual. Swire, fan de la banda desde hace años, vio en ellos un espíritu afín: “Aunque nuestros sonidos son diferentes, venimos del mismo lugar”. Esta conexión se refleja en el videoclip, donde la estética industrial y caótica refuerza la narrativa de la canción: una celebración de lo salvaje frente a un mundo domesticado por algoritmos. El tema es un recordatorio del poder del drum and bass para canalizar la rabia. Sin embargo, su intensidad a veces sacrifica sutileza, y las letras, aunque provocativas, carecen de la profundidad introspectiva de ‘Save The Cat‘, que abordaba rupturas y dudas personales (web:20).
El lanzamiento de ‘Cannibal‘ llega en un momento crítico para Pendulum, que se prepara para su mayor show en Milton Keynes ante 65.000 personas y una gira europea. «Inertia«, con su mezcla de metal, punk y electrónica, busca redefinir el sonido de la banda, como The Prodigy lo hizo en los 90. Pendulum y Wargasm entregan un banger diseñado para festivales, pero su ambición de devorar géneros a veces los deja atrapados en su propia ferocidad. Mientras «Inertia» promete ser un hito, ‘Cannibal‘ es un aperitivo que excita más por lo que anuncia que por lo que es. En un 2025 donde la música busca su alma, Pendulum nos invita a morder, pero el sabor, aunque intenso, no perdura tanto como su legado.
