A la cuarta va la vencida y en esta ocasión la meteorología respetó a ese festival al que llevaba 3 años intentando boicotear sin éxito. El Interestelar Sevilla se engalanó por todo lo alto para una de esas ediciones que marcan la diferencia, con casi 40.000 asistentes a lo largo del fin de semana, 20.000 gargantas que cada día se pusieron de acuerdo para cantar a una sola voz.
Una nueva distribución del recinto nos daba la bienvenida, los clásicos escenarios siameses que presidian el recinto en años anteriores se habían distanciado dividiendo la gran pradera del CAAC en dos grandes zonas de conciertos que se completaban con dos escenarios secundarios, uno de ellos la carpa by Obbio. Especial mención también a esta carpa, que se situó sobre el lago artificial y cuyo tamaño y sonido se vio ampliamente mejorado respecto a años anteriores.
Una vez exploradas las novedades del recinto llegó el momento de los conciertos, los primeros desde la protección de sombra de la zona VIP, unas gradas también mejoradas respecto a otros años, más amplias y mejor equipadas. Desde alli disfrutamos de los conciertos de Morgan y La M.O.D.A., los cuales empezaron a negociar con el público el desalojo de la sombra de los arboles y el acercamiento a los escenarios. No fue hasta la llegada del tandem Zahara-Muerdo cuando se notó como tanto el recinto como los escenarios se llenaron.
La paulatina retirada del sol y el fin del alcohol que muchos asistentes bebían a la entrada del festival daban el pistoletazo de salida a la parte mas fuerte del festival, Zahara, Ferreiro, Rozalen, Second, Shotta y Fangoria… ¡Ahora empezaba de verdad el festival!
Una noche genial en el que si tuviésemos que poner alguna pega sería el setlist de Fangoria donde muchos echamos de menos ese sabor mas añejo que tienen los grandes clásicos de Alaska. De igual forma, una noche maravillosa donde destacaré los conciertazos de Ferreiro, Second y Shotta como lo mejor del día.
LLegó el sábado y este día tenia nombre propio Vetusta Morla, las camisetas del grupo empezaron a inundar el recinto. Yorch, Carmen Boza y Shinova empezaron la fiesta en un recinto que en esta ocasión empezó a llenarse antes que el día anterior pero que no se vio realmente lleno hasta el tandem Erentxun – Tu Otra Bonita a las 21:00 aprox.
Mikel presentó su último trabajo entre otros temas propios pero sin dejar de lado algunos pildorazos de Duncan Dhu que nos hicieron corear a todos, desde lo mas veteranos que llevaban décadas cantando esos himnos hasta lo más jóvenes que solo conocían el estribillo. A su vez al escenario Coolway subieron Tu Otra Bonita, la comparación respecto a su paso el año anterior fue abrumadora, el crecimiento del grupo es innegable y el Interestelar lo demostró con una marea de público que cantaba sus temas o su versión de «La Leyenda del Tiempo» que creo recordar también sonó la edición anterior.
Llegó Depedro como anticipo al gran momento del Interestelar 2019 y el público lo esperaba casi tan ansioso como a Vetusta. El público estiraba y hacia el calentamiento a su son, gargantas ardiendo ya, saltos, bailes y unas manos al cielo que se movían al unisono creando una maravillosa visión que recordaba a una pradera marina mecida por el mar.
Al fin, el público corría de un escenario a otro, empezaba a verse movimiento sobre el escenario y la salida de Vetusta Morla era inminente. Que Vetusta Morla haga con conciertazo no es noticia, que lo hagan todo bien tampoco, que el Pucho enloquezca sobre el escenario y el público con el tampoco… no hay nada malo que decir de un grupo que desprende magia sobre el escenario con un setlist repleto de canciones que ya forman parte de la historia de la música española.
El final del festival era cosa de Toteking, acompañado de su hermano Shotta que tras su paso el viernes se quedó para hacer aun mas especial el cierre del festival. Tras esto, llegó la fiesta de despedida, hora y cuarto de baile ofrecido por la DJ valenciana Inmir. Una edición del festival que otro año más demostrado el saber hacer de la organización, una edición sin incidentes ni retrasos en los horarios, una edición que quedará en la memoria de todos los asistentes.