por El pasado viernes tuvo comienzo el ciclo de conciertos Momentos Alhambra Acustiquisimos. Conciertos en acústico, en un escenario más cercano al público, con una puesta en escena singular y de la mano de artistas imprescindibles en el panorama nacional, que se repetirá a lo largo del mes en Vigo, A Coruña y Ourense.
El pistoletazo de salida ha sido con Ángel Stanich en el Patio de Cristal interior del Hotel San Francisco, acogiendo en un edificio característico de la Zona Vella de la capital gallega a un artista tan misterioso como Stanich. Con unos pocos minutos de retraso, se subió junto al guitarrista Victor L. Pescador al pequeño escenario montado para la ocasión entre aplausos y vítores del público, que ya estaba entregado a su magia antes siquiera del primer acorde. Tras un apreciado ‘boas noites’ presentó el ciclo Acustiquisimos y agradeció la oportunidad de compartir su magnética música con los allí presentes.
Tomó su tiempo para afinar la guitarra antes de comenzar, algo que sería la norma tras cada canción, y rompiendo el silencio con un “último aviso para los pasajeros” empezó el concierto con ‘El Outsider’ de su primer disco “Camino Ácido”. Siguiendo con un tema del mismo disco, ‘La Noche del Coyote’ que interpretaría tocando a la par su guitarra y una armónica.
Para entonces el público ya estaba metido de lleno en sus letras, y como no podía haber un lugar mejor para tocarla saltó con ‘Galicia Calidade’, la situación lo requería y todos los allí presentes disfrutaron con especial emoción coreando su letra. La sorpresa de la noche llegaría al preguntarse: ‘Qué Sera de Mí’. Su tema más reciente, que a pesar de haberlo lanzado hacía solamente una semana, no pilló desconcertado al público que ya conocía la canción como si de un clásico se tratase. Qué tendrán sus letras de especial para que en tan poco tiempo sus temas nos resulten tan familiares e indispensables en nuestras listas de reproducción.
Continuó con temas imprescindibles para disfrutar de su particular estilo como ‘Mezcalito’, ‘Un Día Épico’, ‘Escupe Fuego’ o ‘Hula Hula’, en la que la anécdota resultó ser su letra, sorprendiendo al público en una de las estrofas mientras cantaba “prefiero ser Godzilla que Manuel Campo Vidal”, aclarando al terminar la canción que, pese a la confusión de varios, la comparación es con Bob Dylan, no con Godzilla, y confesando que era la primera vez que la interpretaba así .
Se despedían dejando con ganas de más a un público entregado e imbuido en la atmósfera que deja por donde pasa Stanich. Pero no podía abandonar Galicia sin tocar tres de los muchos temazos que tiene. Para los bises se reservaba ‘Carbura’ y ‘Mátame Camión’ con los que hizo vibrar a todos. Sin embargo la traca final llegaría con su cierra-conciertos, ‘Metralleta Joe’, para el que cogió su guitarra y lo dio todo, bajando del escenario a disfrutar con los asistentes. Con el ánimo por las nubes, el público despidió como se merecía a Stanich, que prometía volver pronto y nos dejaba por el momento, eso sí, con una noche de música increíble para el recuerdo y las ganas de disfrutar de su magia de nuevo.
