enero 18, 2025

La sutileza agridulce de José González

Desde hace algún tiempo los festivales ya no son tan solo eventos que suceden durante un tiempo determinado en un espacio. Alrededor de ellos se ha generado todo un universo de confirmaciones, charlas y ciclos. Así O Son do Camiño presentaba una serie de seis conciertos en distintas localidades galegas con las que completaría un 2018 en el que no solo ha nacido sino que se ha convertido en referencia dentro del panorama estatal de festivales.

Dentro de este serie de conciertos en Hipsterian Circus no acercamos al Teatro AFundación de Pontevedra para así poder disfrutar de la visita de José González a tierras galegas tras su anterior paso formando parte del cartel del Atlantic Fest en 2016. Un parada en el que el sueco, de ascendencia argentina, presentaría ante nosotros su aclamado trabajo de 2015: «Vestiges & Claws«.

Una silla roja sobre un pequeño módulo, una guitarra sobre su funda y un telón que dibuja el mundo en el que González nos sumergirá en cuestión de minutos. Una puesta en escena sencilla que arroparía la música del artista, sencilla también en sus formas pero siempre cambiante a la hora de su interpretación.

Pasaba un cuarto de hora de las nueve de la noche cuando el Teatro AFundación se sumía en la oscuridad. Así en medio de la noche artificial José González tomaba asiento en la silla de la que no se despegaría en toda la noche para comenzar un concierto en el que recorreríamos buena parte de su discografía, tres discos acompañan los 15 años sobre las tablas de González quien nos hechizaba disparándonos ‘Far Away‘ a quemarropa.

Sutilidad, delicadeza, temas como ‘Heartbeats‘ o ‘Crosses‘, luces, sombras, sonrisas tímidas y melodías que te recorren con sutileza convierten los conciertos de José González en oasis en medio de la cotidianidad de nuestros días y ciudades.

Una vez más, a pesar (o gracias) de la austeridad de la noche, José González consiguió que su versión de ‘Teardrop‘ que ya le pertenece casi tanto como a Massive Attack sonase sobre cogedora rompiendo el silencio sepulcral de durante todo el concierto se instauró en el Teatro. Otro cover de otros británicos ponía punto y final al concierto del sueco, con ‘Blackbird‘ de The Beatles llegaba el final a una noche cargada de folk.

Evidentemente José González nunca decepciona pero sí es cierto que su paso por Pontevedra dejó una sensación agridulce en la que se mezclaba la magia de los sonidos del artista con la escasa duración y el alto precio de las entradas, más aún si las comparamos con recientes shows de González en los que el cantautor ha actuado junto con la orquesta The String Theory y el precio de las entradas era igual o incluso más barato que en su visita a Pontevedra donde cada minutos de espectáculo supuso casi un euro de desembolso para las localidades más caras del teatro.

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