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Hace un par de meses los granadinos Dolorosa compartían ‘Pasar la Tarde‘, tema adelanto de este «El Gran Presentimiento«, un segundo LP de la banda andaluza con 10 cortes cargados de pop luminoso que veían la luz el pasado 5 de octubre y que poco a poco iremos desgranando.
Este nuevo álbum llega a nosotros un año después de aquel «Que el Mañana Sea Bueno«, un trabajo que podría considerarse una continuación del mismo, siendo así un gesto de reafirmación de la banda. Melodías más propias de principios de los 2000 con aquella etiqueta tan en boga en aquel tiempo de soft-music, un pop melódico que deja una sensación agridulce y nostálgica a la vez que bella.
El disco se abre con ‘Yo No Tengo Nada‘, un tema que de primeras nos sorprende por la presencia de unas guitarras a las que los andaluces no nos tienen acostumbrados. En este segundo LP la banda ha decido vestir mucho más sus canciones buena muestra es esta ‘Yo No Tengo Nada‘ o ‘Arder en Leña Ajena‘.
Pero sin ninguna duda uno de los temas que más me han llamado la atención ha sido ‘Biografías‘. Soy de aquellos que creen que los movimientos musicales surgen en gran medida como un síntoma de protesta ante una situación que el artista considera injusta: el punk clamaba contra la depresión económica a la que Reino Unido estaba abocada, al otro lado del charco se quejaba de la situación del proletariado americano, el indie nace como contracorriente a la música que tiene como objetivo el comercio… Actualmente la grandes compañía (sorprendentemente de telefonía) controlan la música por mucha etiqueta de indie que se le coloque así que siempre llama la atención encontrarse temas como ‘Biografías‘ en el que un grupo se define clara y políticamente, un tema que habla de la situación política actual y lo hace sin caer en la canción protesta más propia de los cantautores. Aunque esta no es la única referencia política que podemos encontrar a lo largo de este nuevo trabajo de la banda granadina y desde Hipsterian os recomendamos que repaséis con un poco de calma las letras de Dolorosa, por ejemplo la de ‘Pasar la Tarde‘, canciones de pop pero con un poso social importante.
Sin duda «El Gran Presentimiento» es uno de esos trabajos que bien nos pueden acompañar en los días grises de trabajo llenándolo todo de texturas pop con un cierto corte naïf, unos de esos trabajados que de primeras nos puede parecer mucho más liviano de lo que realmente es cuando con detenimiento te paras a escuchar sus letras más allá de las melodías. Dolorosa es un grupo único capaz de pasear por un sendero equidistante de La Buena Vida y Amaral y solventar la papeleta sin caer en el tedio habitual de las radio-fórmulas. Gran parte de la culpa de este éxito la tiene Natalia Muñoz y ese tono tan especial. Una voz que nos evoca constantemente a Irantzu de La Buena Vida, voces, la de Natalia y la de Irantzu, capaces de cargar de poética las acciones más banales. Acciones que Raúl Bernal no deja de retratar en unas letras que son las compañeras ideales de viaje para la voz de Natalia generando así un binomio capaz de acercar, con cuidado y fragilidad, al oyente a las realidad que como exponentes de una generación les ha tocado vivir.
«El Gran Presentimiento» de Dolorosa es susurrarnos que nos debemos unir a la revolución de los puños al aire en las calle, a la revolución del amor en todos sus expresiones.
