diciembre 10, 2024

La nostalgia se hace con EDP Vilar de Mouros

Hoy os acercamos al EDP Vilar de Mouros es (auto) denominado el festival más antiguo de la península ibérica y posiblemente sea cierto, ya que la primera edición se celebró allá por 1965. Entre idas y venida y algún que otro parón, en el año 2016 el festival regresó a la primera línea de los festivales lusos. Ubicado en la ribera del río Coura, al norte Portugal y a pocos kilómetros de la frontera con Galicia, ha ido poco a poco seduciendonos con su aire nostálgico para cruzar a raia y realizar así una nueva incursión al país vecino.

Ya sabéis que aquí nos gusta contaros lo que sucede con pelos y señales pero en esta ocasión, debido a los quéhaceres diarios, nos tuvimos que conformar con asistir únicamente a la jornada del viernes, al igual que hizo el primer ministro portugués António Costa que se acercó al festival para presenciar el concierto de GNR, banda de rock portuguesa de referente para varias generaciones de lusos.

A diferencia del primer ministro para nosotros el EDP Vilar de Mouros comenzaba cuando David Fonseca encaraba al tramo final de su concierto. Muy posiblemente su nombre no os suene pero Fonseca es una de las mayores referencias dentro del pop luso, un pop luminoso y afable cargado de versiones. Siendo sinceros y puestos, que era la primera vez que íbamos, decidimos aprovechar los últimos temas de su directo para recorrer el recinto y lo hicimos entre otros al ritmo de su versión de ‘Just Can’t Get Enough‘ de Depeche Mode.

El EDP Vilar de Mouros, es amplio, muy amplio. Sin apenas obstáculos que impidan ver el escenario desde cualquier rincón del recinto y con una interesante oferta gastronómica. Tras asistir al Vodafone Paredes de Coura, considero que hay dos puntos muy interesantes dentro de esta oferta que estaría realmente bien importar a España: el primero, que en ambos festivales pudimos encontrar lugares en los que se servía café y el segundo, importante también, es que los precios no son abusivos, es decir, podemos adquirir algo que llene y caliente nuestros estómagos o una cerveza sin necesidad de pedir un préstamo bancario como sucede en buena parte de los festivales del estado ¡Que no sangréis a los asistentes, que son quieres comprar las entradas y si no la compran no hay festival!

Y tras el momento reivindicativo llega la hora de hablar de música. Este mismo año 2018 veía la luz «Violence«, el sexto álbum de los británicos Editors, un trabajo en el que la banda se adentra más en sonidos electrónicos y en el que dejan las guitarras a un lado, y repito un trabajo porque el directo de los de los de Birmingham sigue siendo igual de contundente y potente que el que tenían con aquel «The Black Room«.

Es cierto que abrir con ‘Cold‘, para quienes en este tiempo han perdido el camino de Editors, nos hace esperar un concierto alejado del rock y el post-punk que impulsó a la banda capitaneado por Tom Smith a ser una de las grandes sucesoras de Joy Division. Nada más lejos de la realidad de sus directos que demuestran que la banda funciona como un engranaje perfecto más allá de los problemas puntuales del concierto.

Porque sí, hemos de hablar de un problema: no fue la mejor noche para la voz de Tom Smith. Es cierto que si es la primera vez que ves a la banda en directo muy posiblemente no aprecies el detalle de la leve afonía de Smith pero si has asistido a alguno de sus conciertos eres consciente de los juegos vocales que al británico le gusta tanto hacer y que el pasado viernes no pudo. No, no decimos que cantase mal porque la actuación de la banda al completo fue más que correcta pero sí somos conscientes que Tom Smith sonó muy más bajo y discreto de lo que lo hace habitualmente.

Editors dieron un concierto correcto, cargado de energía que se reflejaba en una ráfaga final de luces y guitarras medidamente descontroladas que se ahogaban en los aplausos de unos fans que terminaban más que satisfechos tras casi hora y media de actuación en la que no faltaron los temas que han hecho grande a la banda, temas como ‘The Racing Rats‘, ‘Munich‘ o ‘Papillion‘ casi fusionada con ‘Magazine‘ para poner el punto y final a los bailes y la música de los británicos.

Si un nombre nos seducía, no solo de la noche sino también del festival, era el de Incubus. Los californianos capitaneados por Brandon Boyd lograban la fama a finales de los 90 con aquel «Make Yourself» que contenía en su interior temas como ‘Drive‘ o ‘Pardon Me‘. Os contamos que la banda no permitió el pasado viernes el acceso al foto de los compañeros gráficos y por ello consideramos que debemos hacer mención de ello y una crónica a su altura: Incubus tocó en el Vilar de Mouros de 2018 en un buen concierto.

Así que tras el show de los norteamericanos decidimos cruzar de nuevo al frontera y regresar a casa. Por delante un fin de semana que se antojaba complicado y en el que la paciencia tendría que ser una de nuestras virtudes. Nos despedimos del EDP Vilar de Mouros comentando que desde la organización del festival ya nos han hecho llegar sus fechas para la edición de 2019 que se celebrará los días 22, 23 y 24 de agosto. De igual manera nos cuentan que ya tienen tres bandas de primera nivel cerradas ¿A quién os gustaría ver el próximo verano por allí?

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *