por The Visiters se trata de una apuesta nueva con miras al panorama internacional. Con un sonido que bebe de los Queens of the Stone Age o The Black Keys, este grupo madrileño busca traer algo de su sonido al interior de nuestras fronteras en un álbum debut, «Versus», en el que muestran la rápida evolución a la que se han visto sometidos para entregar un álbum que suena profesional y poderoso a base de melodías directas, solos de guitarra cargados de nebulosa y algún que otro tinte indie rock. Hablamos con Adri, bajista del grupo, acerca de sus orígenes y del propio álbum.
(Pregunta) Con esta pregunta me gusta abrir muchas entrevistas, y es que me gusta empezar hablando del arte del disco y del grupo. En vuestro caso, es un estilo futurista muy interesante, ¿cómo surge?
(Respuesta) El nombre del grupo lo cogimos por la película de “Les Visiteurs” de Jean Reno y entra todo el concepto de ciencia ficción de los visitantes y demás que siempre nos ha gustado mucho. En las primeras portadas ya buscamos esa estética futurista de ciencia ficción. Cuando grabamos el disco tuvimos alguna propuesta para la portada, pero al estar grabando el álbum fueron saliendo los sonidos de sintetizadores más espaciales y con eso dijimos que adelante con una portada así. Tiene relación nuestro nombre, el sonido, la foto promocional y el arte.
(P) Metiéndonos más en vuestro sonido, simplemente puedo decir que sonáis de la hostia. Hay algo de Queens of the Stone Age, The Black Keys… Todo ello por las guitarras con nebulosa y el vocal rasgado. ¿En qué os habéis ido fijando para crear vuestro sonido?
(R) En nuestros gustos personales tenemos mucha variedad, a algunos nos gusta el indie y a otros el rock clásico de los setenta, a otros el funky… Tenemos algunos puntos comunes como los que dices o Jack White, son referentes, bebemos también de The Beatles, Arctic Monkeys… Creemos que esa variedad que hay entre nosotros, esa amalgama es algo muy positivo. Cada uno aporta matices al sonido.
(P) ¿Cómo reacciona la gente al escucharos por primera vez cuando os presentáis como una banda nueva pero a la vez con este disco tan bien currado?
(R) Sobre todo la gente que nos conocía alucinaba bastante con el resultado, aunque fuimos nosotros los primeros que alucinamos con el sonido del disco. Entramos al estudio con un sonido bastante definido, pero fue Sergio [el productor] el que le dio ese toque que nos ha hecho sonar de esa manera tan profesional. Ha habido un salto de calidad y de madurez, que esto va en serio ya.
(P) Este salto también habrá venido por haber invertido en el proyecto y no haberlo dejado en algo casero y fácil?
(R) Ya habíamos tenido experiencia grabando de una manera más casera. Grabamos un primer EP, dijimos de convertirlo en un disco y el resultado no fue el esperado porque no alcanzamos el sonido esperado, así que por eso decidimos sacar el EP en 2015 con ese sonido más sucio y casero, pero ahora queríamos apostar por algo grande.
(P) ¿Cómo han ido surgiendo los temas? Hay temas como ‘Fight Of Our Lives’ que tienen más rodaje y surgieron hace tiempo y tienen ese rollo más apocalíptico. ¿Cómo surgen las letras y melodías?
(R) Cuando nosotros nos juntamos empezamos a trabajar temas muy sencillos. Según fuimos avanzando tocamos palos, el tema que dices es de los que más tiempo tiene y está en el EP de 2015 y ya cuando decidimos grabar el disco fuimos probando otros sonidos. Por ejemplo ‘Hocus Pocus’ es más oscuro y tiene más recorrido, pero ‘Two Whisky Shot’ tiene un sonido más soul por ejemplo. Sergio Molina fue el que dio el toque final al disco, consiguió que a pesar del tiempo que ha pasado entre la composición de los temas, suenen coherentes. En cuanto a la composición, por un lado escriben las letras entre Adri Díez e Iñigo, y normalmente aportan un riff o una pequeña estructura y trabajamos en conjunto, dándole forma a las canciones hasta que llegamos. un resultado final.
(P) Me llama la atención que en temas tan cortos habéis sido capaces de explorarlo todo: solos de guitarra, teclados soul, armónicas, pasajes más apocalípticos de ciencia ficción. ¿Cómo se concreta todo y se consigue que uno no acabe haciendo como Tame Impala sacando temas de siete minutos?
(R) Ese proceso de reducir las canciones ha sido a raíz de trabajarlas en directo. Después de tocarla mucho te das cuenta de lo que no funciona, de lo que sobra o lo que falta. Por ejemplo ‘Hocus Pocus’ ha sido muy pulida, se han cambiado secuencias de acordes… Nosotros hemos llevado hecho ese trabajo de pulido al estudio, pero Sergio ha aportado muchas cosas. Ha descartado teclados y los ha sustituido por otras melodías, cambiando efectos… Él ha terminado de rematar.
(P) Quería preguntarte por el cierre del álbum, ‘You’re No Longer Here’, donde se corta la melodía y se mete un sintetizador que barre la escena, pero luego entra una especie de diálogo. ¿Eso qué es?
(R) Me hace ilusión que lo preguntes porque es la primera vez que nos lo preguntan (Risas). Salió de forma totalmente improvisada, esa última nota de audio que se escucha es el propio Sergio gritando “silence in the studio” como en una grabación de Pink Floyd. Le dijo a Adri el guitarra que hiciera ruido con la guitarra para crear ambientación, pero al final se desechó. Lo que pasó fue que en el momento climático llegó Sergio, cogió la guitarra y se puso a gritar a través de la pastilla de la guitarra, y ese sonido está filtrado a través de la guitarra (Risas). Una de sus múltiples locuras de la grabación.
(P) Antes de meternos en esas locuras, por terminar con ‘You’re No Longer Here’, ¿por qué acabar así y no hilar con el principio de paso, ese tema que aparece como una hostia en la cara como los King Gizzard and the Lizard Wizard? O, al revés, ¿por qué no empezar de forma suave, introduciéndote poco a poco en el álbum?
(R) Queríamos hacer este cierre ambiental y no habíamos pensado en hacer algo como lo que comentas, pero suena muy chulo. Hicimos muchas propuestas para la apertura del disco, pensamos en un inicio relajado, lo planteábamos durante el proceso de grabación para agilizar el tema. Cuando escuchamos el disco ya masterizado y terminado, a nosotros nos dio una hostia con esta primera impresión. Así que decidimos que la tuviera también la gente y que desde el segundo cero el álbum impactara.
(P) Del tema locuras de Sergio, ¿qué me podrías contar del proceso de grabación a nivel anecdótico?
(R) La grabación fue curiosa porque Sergio tiene un estudio muy acogedor, es un placer estar allí. Te crea un ambiente muy hogareño. Estás en tu sofá grabando, tienes una Xbox, Sergio acaba las grabaciones poniendo música… Te sientes muy cómodo. Pero de vez en cuando a Sergio se le iba la cabeza y se ponía a bailar y tiraba una silla contra la pared y dejaba una marca. ¡Pero todo de buen rollo! (Risas). O a lo mejor cogía un fragmento de una canción y te hacía un mini-mix con una chorrada. Un ejemplo es que Iñigo se equivocó grabando y digo “ay, coño”. Eso lo grabó Sergio, lo mezcló en una canción y acabamos llorando de la risa.
https://www.youtube.com/watch?v=FNd4LIwZkrM
(P) Hace un par de semanas presentabais en la Costello en Madrid vuestro álbum, ¿tenéis más fechas confirmadas?
(R) ¡El 17 de diciembre sábado en el Sótano!
(P) ¿Cómo lleváis este sonido al directo, rollo Kitai descamisado o algo más pureta como Queens of the Stone Age?
(R) (Risas) Somos más recatados que Kitai, que lo dan todo y hay que reconocerlo. Más tranquilos y más elegantes. Aún así lo damos todo. Bueno el otro Adri acaba descamisado en todos los conciertos, eso sí.
(P) Sois un grupo joven, habéis ganado premios, en 2014 publicáis vuestros primeros temas, ahora el debut… ¿Cómo surge el proyecto y cómo habéis llegado hasta aquí? Por otro lado, quería decir que me parecíais un grupo muy serio pero luego he visto vídeos vuestros y sois muy cachondos.
(R) Es verdad que damos una primera impresión de mucha seriedad y tal. A la hora de trabajar la seriedad bien, pero luego tenemos mucho sentido del humor, en los directos sobre todo. Iñigo tiene mucho humor y te puede presentar un tema diciendo “va sobre la cúpula del ornitorrinco”. Hay mucha gente que flipa. O en otro concierto nos disfrazamos: uno de mariachi, Mario Bros, troglodita… Hacemos lo que nos apetece. Entre nuestras covers están ‘Mi Gran Noche’ y ‘La Gozadera’. En cuanto a la trayectoria, originalmente, Adri guitarra e Iñigo se conocen en la facultad, forman un pequeño grupo con un batería que al final deja el grupo y tocan covers. A través de un contacto peculiar conozco a Adri y formamos la primera formación seria y empezamos a componer y demás. Con el tiempo entró Darío a la batería en 2014, justo para la grabación de los primeros singles. Cerramos la formación, nos ponemos a componer, ganamos el primer concurso, seguimos a dar forma a nuestros temas en un EP, ganamos el Hard Rock Rising. Después de eso nos metimos a saco con el disco y ya a tocar en el mayor número de salas posibles.
(P) No quiero que lo dejes pasar, define “contacto peculiar” que me ha llamado la atención.
(R) (Risas) Conozco a una chica a través de Badoo que resulta que también conoció a Adri por Badoo también. Nos pone en contacto porque sabe que los dos tocamos instrumentos. Podríamos decir que somos un grupo que nace en Badoo (Risas). De hecho Iñigo cuando hace promo en los conciertos dice “Buscadnos en Twitter, Facebook y también en Tinder”, y la verdad, ahí estamos algunos (Risas).
(P) Por último, quería comentar que con vosotros surge el eterno debate: no sonáis españoles. Ya no solo porque cantáis en inglés, sino porque destiláis un estilo que no se hace por aquí. ¿Crees que os supone una ventaja?
(R) Pues creemos que es una ventaja en cuanto a poder diferenciarte. El panorama musical se ha abierto gracias a poder grabarte en casa y poder distribuir tu música a muy bajo coste en Spotify o en plataformas gratuitas. Puedes construirte tu proyecto desde abajo con tus posibilidades. Si indagas un poco vas a encontrar cualquier cosa. Pero claro, es el mismo pastel para muchas bocas y eso dificulta el poder vivir de ello. Tener un sonido peculiar te permite diferenciarte de esa masa de grupos, y hay que conseguir destacar entre esta masa de gente. Nuestro objetivo es vivir de la música en definitiva. ¿Conseguirlo a corto plazo? Ojalá, es un sector complicado pero nos gustaría mucho.
