Hace ya unos años que los crowdfunding se han convertido en la fórmula perfecta para que algunos músicos puedan sacar sus discos. Hay veces que la cosa se va un poco de las manos y sólo falta que el músico en cuestión te venda a su madre con un lazo o un trocito de su alma embotellada. Aunque a lo mejor no es justo juzgar lo que está dispuesto a vender un músico de sí mismo, cuando en realidad ansiamos escuchar su nueva música, tanto como ellos hacerla y sacarla a la luz.
Este es mi caso cuando se trata de Bobby Long, un músico británico afincado en Nueva York que ha empezado hace unas semanas una campaña en pledgemusic.com para sacar su cuarto disco. Sí, amigos, Bobby Long va por su cuarto disco y no habéis oído hablar de él pero no temáis, yo os lo cuento.
Bobby es un músico que se ha movido entre el folk más puro de su primer disco “A Winter Tale” y el rock, incluso toquecitos de pop, en su segundo trabajo “Wishbone”. En su tercer álbum, Bobby decidió volver al folk, al sonido acústico y directo que le han hecho crearse una base considerable de fans a través de sus giras por Estados Unidos y parte de Europa, para ello creó, por primera vez, una campaña de crowdfunding que le permitió sacar “Ode to Thinkig”, que no es otra cosa que una muestra del crecimiento tanto musical como personal que ha experimentado a lo largo de los años en la carretera.
De momento, no sabemos cuáles son sus intenciones en cuanto al sonido del nuevo disco, lo que sí me atrevería a afirmar es que las letras alcanzarán el nivel y la profundidad de sus anteriores trabajos. Y es que Bobby Long es algo más que un músico. En 2012 sacó su primer libro de poesía, “Losing my Brotherhood”, y en breve saldrá el segundo “Losing my Misery”, en el que además se ha atrevido con las ilustraciones que acompañan a los textos. Bobby es un artista inquieto, que como dirían los “chanantes” “No puede parar de crear”.
Estos libros, al igual que todos sus discos y algunos EP’s, puedes encontrarlos en su crowdfunding, en el que no falta de nada. Todas las opciones, desde la más económica, el disco en formato digital, hasta las más caras, conciertos privados, contienen el access pass, que da acceso a información sobre el disco, vídeos en los que el músico va contando la experiencia y el proceso de grabación, etc.
Como empieza a ser habitual en los crowdfunding puedes encontrar de todo, desde lo más normal como discos y merchandising, hasta lo más extravagante como la Basket of Bobby’s Favourite Things o lo que también podríamos llamar la cesta de navidad, porque ahí entra de todo: libros, discos, pelis, café, chocolatinas… Hay cosas curiosas, como ediciones especiales de vinilos o DVD’s de conciertos y “Knickerbocker Glory” un EP grabado en su casa que sólo estará disponible a través de la campaña.
Y bueno, ya pasamos al apartado “te vendo mi alma” con cosas como la grabación en mp3 de tu canción favorita especialmente dedicada, letras de las canciones o poemas a puño y letra, mensajes de felicitación vía telefónica. Además, Bobby también te vende su tiempo, clases de guitarra o consultas sobre composición vía skype, meet & greet después de un concierto o el remate, pasar un día con él por Nueva York…
Algunas de las últimas opciones pueden resultar excesivas pero si este es el precio a pagar por la libertad creativa no seré yo quien juzgue a Bobby Long, ni a ningún músico que se enfrente a este tipo de campaña, aunque pueda parecer que vendan su alma, al fin y al cabo, ¿no es eso lo que nos ofrecen en cada canción, disco o concierto?
Si has llegado hasta aquí y te interesa saber lo que puede ofrecer Bobby Long, puedes escuchar algo de su música y consultar toda la información sobre el crowdfunding en pledgemusic.com