Viejos conocidos ya de las salas españolas, el cuarteto dublinés Delorentos ha vuelto a embarcarse en una gira que les ha llevado a recorrer de punta a punta nuestro país, presentando una vez más su último trabajo «Night Becomes Light». Y como no podía ser de otra forma, hicieron escala en Madrid por todo lo alto. Venían a cumplir uno de sus sueños más ambiciosos hasta la fecha: tocar en la Joy Eslava.
Momentos antes del concierto nos contaban cómo dicha sala les traía muy buenos recuerdos: participaron en concierto tributo a The Smiths en ese mismo escenario y una de sus actuaciones más populares en youtube fue grabada en los exteriores de la sala.
Con el telón del artwork del último trabajo de Delorentos ya colgado sobre el fondo del escenario, daba comienzo tan prometedora noche de la mano de Juan Zelada, quien ya fuera telonero de la banda irlandesa en su último paso por la capital española. Una vez más demostró que su pop fresco con toques de soul y blues era más que suficiente para hacer mover a los allí presentes.
Con puntualidad irlandesa, hicieron su aparición Delorentos mientras sonaban las primeras notas de ‘Forget The Numbers’, uno de los temas más pegadizos de su último disco. A este hit le dieron paso otros temas como ‘Show Me Love’ y ‘Fits (Too Drunk To Drive)’ ante el entusiasmo de un público más que entregado.
Las guitarras acústicas hacen su aparición en la que fue la parte más sentimental de su repertorio aquella noche: Kieran McGuiness, guitarra y cantante del grupo irlandés, interpreta ‘Petardu’, una canción emotiva que narra la historia sobre la adopción. A continuación llega la sorpresa del último disco de la banda: por primera vez la voz protagonista recaía en Ross McCormick, el batería, interpretando la maravillosa ‘Valley Where The Rivers Run’. Sin apenas tiempo para coger otro kleenex del bolsillo, Kieran interpretó ‘Home Again’, canción que escribió al enterarse que iba a ser papá.
Si hay algo que tenemos que destacar de Delorentos es la conexión con el público y esto se agudiza en el constante chapurreo de frases en español durante el concierto, bastante lejos quedaron ya los “muchas gracias” de rigor. Como anécdota curiosa que refleja esta continua disposición, los irlandeses se hicieron con un viejo radiocassete y bromearon que era la esencia para la interpretación del siguiente tema mientras pedían la colaboración del público en los estribillos de ‘Everybody Else Gets Wet’.
Seguimos bailando y la locura se desata con ‘Waiting’, en la que Kieran decide terminar la canción entre el público, gritando y saltando ante la alegría e incredulidad de los allí presentes. Tras unos minutos vuelven a subirse al escenario para interpretar los bises y cerrar el concierto con su tema estrella ‘S.E.C.R.E.T.’ dónde será Ronan Yourell, también guitarra y cantante de la agrupación, quien aproveche para darse un baño de masas.
Estábamos ya preparados para recoger nuestros abrigos, cuando Delorentos nos cuentan cómo hace unos años tocaron ‘Bullet In A Gun’ en acústico en las afueras de la sala y nos piden que les acompañemos a la calle. Querían repetir aquel momento, esta vez con todos nosotros. Aprovecho para hacer un llamamiento a los encargados de la seguridad de eventos masivos: Si en algún momento necesitáis un manual de «Cómo desalojar pausadamente una sala en 2 minutos» se lo podéis pedir a estos cuatro irlandeses.
Y tras la organizada retirada, nos plantamos en los exteriores de la Joy Eslava ante la sorpresa de algún que otro miembro de seguridad al grito de «¡Qué alguien pida permiso a los curas!» para deleitarnos con la forma más especial con la que poner fin a un concierto.
¡Esperamos volver a verles pronto!