El reto era complicado: conseguir que olvidáramos el calor asfixiante de la capital para transformarlo en un día de vacaciones junto al mar. Sen Senra volvió a Madrid el jueves 25 de junio para seguir presentando su álbum debut, “Permanent Vacation” (Crispis, 2015). Lo hizo en la sala Costello, dentro del marco de celebraciones de la tercera tirada de Speed Sound Magazine. El joven vigués es una de las apuestas seguras de la revista.
Christian Senra vino acompañado de su banda, aunque prácticamente la totalidad de su disco haya salido de su propio imaginario. “Permanent Vacation” fue la primera en sonar y la que nos obligó a pegarnos el chapuzón; nada de darse el baño solo hasta las rodillas. Cuando en las entrevistas le preguntan por la base de su inspiración, siempre habla de las playas de California, para luego aclarar que él nunca ha pisado una. Y eso podría tener incluso más mérito que el de los mismísimos Allah-Las, que llevan años respirando el salitre yanqui desde primera línea de playa. Rock joven y urgente cantado en inglés, construido desde la voz rota y personal de Senra, a la que su guitarra eléctrica pone la crudeza y suciedad propias del rock garage. El vigués fue ondeando el repertorio de canciones con gran agilidad, frescura y, sobre todo, con la liviandad que caracteriza el espíritu surfero. Un actuación que abarcó la mayoría de temas de “Permanent Vacation”, desde la locura de “Lunatic” al romanticismo de “She” o “Waiting”, entre algunas de las favoritas de la noche.
“Esta es mi vida ahora mismo” dice Christian Senra cuando le preguntan por cómo afronta su nuevo proyecto musical (Capitán Demo, Radio 3). Su pasión unida a su seguridad para romper con todo sin mirar atrás (dejó de estudiar porque no estaba aprendiendo lo que quería), dejan pocas dudas en el aire sobre el camino que seguirá su carrera. Ahora está componiendo su segundo disco, dentro de ese espacio de trabajo que él mismo dice que vive dentro de Sen Senra. A la espera de más novedades, felicitamos un trabajo que renueva y refresca igual que unas vacaciones en la costa de Venice Beach.