Neuman volvió a Murcia el pasado viernes y fue bastante especial para ambas partes. Ellos presentaban por primera vez (sin contar los adelantos que hicieron del mismo en el SOS 4.8) su exitoso nuevo disco If y los murcianos echaban de menos el saber algo más de esta banda cuyo líder, Paco Román, hacía tiempo se había mudado a Granada. Volvió a una ciudad en la que según dijo, le habían pasado muchas cosas buenas y ese iba a ser un concierto especial. Lo fue, y no solo para él.
El concierto empezó lleno de ovaciones y agradecimientos por ambas partes. Se tenían ganas mutuamente. El aperitivo con
Nunatak no hizo más que aumentar la euforia de un público que sabía que había pagado por ver algo especial esa noche. Los cartageneros estuvieron perfectos en a ejecución y se metieron en el bolsillo un buen número de nuevos fans.
Como comentaba en el párrafo anterior, todo el Teatro Circo estaba en silencio absoluto durante las tres primeras canciones. Es como si estuvieran en una especie de éxtasis del que solo salían para aplaudir y vitorear. Algo practicamente inaudito en un concierto realizado en Murcia (ya que el público es muy dado a darle al «palique»). A parte de la banda le hizo gracia ese silencio, que para ellos se hacía hasta incómodo, ya que se oía prácticamente todo lo que pasaba sobre el escenario.
El repertorio fue dando saltos entre disco y disco, prestando especial atención a sus últimos dos trabajos
Bye fear/Hi love e
If. Dos trabajos que aportaban más luminosidad al sonido de la banda, pero no la pérdida de crudeza en la ejecución. Precisamente eso es lo que destacaría de todo el concierto. Un sonido rocoso y crudo a través de los guitarrazos de Paco y de las embestidas a la hora de llevar los temas por parte de Alex, batería de la banda.
A mi parecer, esa fidelidad a lo crudo, pese a la belleza de los temas que se tocaron aquella noche, es uno de los puntos fuertes que siempre a caracterizado a la banda, pero que en este nuevo repertorio parece estar potenciado tras la producción de Paco Loco. Temas como
Bye Fear/Hi Love,
Jane,
Crab Kiss & Final Song,
Turn it,
Oh no,
un pequeño set acústico formado por
If,
Ingrid y
I have the will, sonaron contenidos hasta que el propio sonido se apoderaba de ellos y todo se desataba.
Todo ese sonido tuvo su apoteosis a través de Too Pretty, para mí el punto álgido del concierto, cuya ejecución en directo superó con creces la ya espléndida pieza del disco. Por el contrario, Hell, uno de mis temas favoritos, sonó como en piloto automático y se llegó a hacer larga. Esa ejecución que tanto me maravilló en Too pretty se repitió llegando hacia el final en otros temas, cosa que hizo que se desvirtuara y que se hiciera un poco repetitiva la forma de atacar a los temas. Sí que era de esperar por la naturaleza de las canciones en sí y por la forma de actuar de la banda, pero e escuchar 3 temas seguidos que acabaran en un éxtasis de guitarras quizás regularizaban la propuesta que tan bien habían ido dosificando en la primera parte del concierto.
En resumen, fue un concierto para disfrutar, ya que sentado en una butaca puedes atender a todos los detalles, porque no nos engañemos, Neuman no es un grupo de ir a saltar hasta romperte los tobillos. Es un grupo para paladear, y el formato eléctrico en teatros les sienta muy bien.